Monday, November 20, 2017

Desnudo mi alma

Desnudo mi alma, porque soy exhibicionista.
Desnudo mi alma, porque quiere ser libre.
Desnudo mi alma, para vestirla de vida
Desnudo mi alma, para acariciarle la piel
Desnudo mi alma, para curarle las heridas
Desnudo mi alma, aunque pueda morir de frío
Desnudo mi alma, para que irradie su calor
Desnudo mi alma, para que te despierte el morbo.
Desnudo mi alma, para que la trates con delicadeza, la conozcas, la sanes, la acaricies, la vistas, la abrigues, la desvistas, y sobre todo, que la tengas, estando en libertad.

Viajero en el tiempo... Y el espacio...

Siempre lo he dicho (creo), o al menos lo e pensado... Quisiera ser como los demás, entender el mundo que me rodea. Es común que me sienta diferente, ajeno, distante a mi realidad. Como otras veces lo he dicho, siento que este no es mi momento, es decir, debería de haber nacido antes o mucho después, en otra época, en otro lugar, incluso, en otro universo...

Amar o no amar... Esa es la decisión...

El amor no es una cosa que aparece de la nada, aunque algunas veces se nos presente y se nos dé de forma natural. Es una decisión, y como tal, es necesario replantearla día con día. Porque hay decisiones de las cuales nos arrepentimos con el tiempo, que cambian debido al cambio de prioridades y necesidades. Hay veces que olvidamos las  decisiones que tomamos. A veces dejamos de observar que es esa decisión la que mantiene alguna necesidad satisfecha, entonces la dejamos, solo para volver al punto de partida. Por eso es que dice el dicho que "nadie sabe lo que tiene hasta que lo ve perdido".
El amor es un contrato, con reglas, derechos y obligaciones. No siempre somos concientes de ello, y a veces, aplican para uno mismo, aunque no nos demos cuenta. Es cuando faltamos a esas reglas y obligaciones, renunciamos a esos derechos, que nos sentimos con un cargo de conciencia. Decimos amar muchas cosas y cuando realmente amamos, tomamos la decisión de aceptar esas reglas. Si amamos la música, le somos fieles, si amamos nuestra familia, les somos fieles, fieles a qué? A esas reglas que nosotros mismos, inconcientemente, nos fijamos como un control, para no perdernos, fijamos limites, para no sobre pasarlos. Dicen que todos los extremos son malos, y el diablo se esconde en esos límites. Eso no implica que puedas romper y hacer un nuevo contrato cuando sientes que tendrás mayores beneficios, pero eso tendrá sus consecuencias, como todo.
A toda acción hay inevitablemente una reacción. Toda decisión es una acción, incluso si esa decisión es no hacer nada. Eso quiere decir que toda acción tiene reglas y sobre todo, consecuencias.
El amor, al ser una decisión, es una acción y tiene reglas, aunque no seamos conciente de ellas. Cuando hay una acción, la reacción recae sobre aquello que accionamos, pero también se nos puede ser regresado. Pensarás que es estúpido, pero recuerda que esto son leyes universales, y aplican en todo, no sólo en lo físico y tangible, sino en lo intangible, y en lo que no podemos ver.
Hay veces que el contrato llega a ser "injusto" para nosotros, pero si decidimos aceptarlo, decidimos aceptar las reglas y todas las consecuencias que conlleva. Eso quiere decir que no estamos exentos a equivocarnos, y tenemos la necesidad de replantear nuestras decisiones. Tampoco quiere decir que nos arrepentimos de nuestras decisiones, simplemente buscamos un contrato que sentimos nos sea más justo. Pero en todos los casos, es común que no leamos lo que viene en letras chiquitas.

Si te amas, déjalo ir...

Dicen el dicho que "si lo amas, déjalo ir". Pero creo que el dicho está incompleto. A veces no debes dejar las cosas porque las amas, sino por amor propio.
Desprenderte de algo por amor, puede parecer muy altruista, ya que la acción conciente es dejarlas partir para que obtengan su propia felicidad. Nos damos cuenta que somos un obstáculo y pensamos CONSCIENTEMENTE que estarán mejor sin nosotros, que los estamos limitando, o incluso, obligándolos a que se limiten. Pero realmente, INCONSCIENTEMENTE, dejarlos ir nos libera a nosotros mismos; porque decidimos que les amamos, pero también nos amamos a nosotros y también tenemos el derecho de ser amados. Les dejamos ir porque sabemos que no nos darán ese amor que necesitamos tanto, como el mismo amor que sabemos que no les podemos dar a ellos.
Es realmente difícil poder separar el amor al prójimo del amor propio. Al dar amor a los demás, inconcientemente nos estamos amando a nosotros mismos ya que nos sentimos bien con ese amor que damos; es decir, inconscientemente nos buscamos hacernos sentir bien. Mientras estemos bien, todo irá de maravilla; si algo no nos hace sentir bien, dejamos de hacerlo, cambiamos de estrategia, replanteamos nuestros sentimientos.
Es decir, no podemos amar sin ser amados, y necesitamos ser amados, tanto como necesitamos amar.

Amar al ser amado

Cuando encuentras a la persona a quien decides amar, no es extraño que le quieras enseña a que te ame.
Existe un deseo que nace y es el de abrirle tu corazón. Deseas que entre en tu vida, le enseñas la manera de permanecer en ella. Nadie nace SABIÉNDOTE amar. Es por eso que primero debes aprender a amarte, para que después puedas amar a los demás, pero también para que les enseñes cómo deben amarte. Puede que sea algo egoista, pero cuando alguien te gusta, no solo quieres saber todo de él, sino que quieres y deseas que él sepa de ti. Porque no hay mayor amor que el de entregarse uno mismo, y eso implica desnudarse el alma. Todos tenemos la necesidad de amar, pero también la de ser amados.
Lo primero implica aceptar a la otra persona como es, pero lo segundo implica cambiarla, porque al enseñarle a amarte, la estás cambiando, y puede ser algo egoista, pero eso también es un poco parte de nuestra naturaleza humana. Cuando deseas algo, te esfuerzas por obtenerlo y quieras o no, eso se puede volver parte de ti. Te cambia.

Tuesday, November 14, 2017

Mundos paralelos

Tengo una teoría algo particular acerca de los sueños...

Pienso que dormir nos enlaza a otros universos paralelos, y tomando en cuenta la inmensidad de espacio, tiempo y universos que existen, no es una idea tan descabellada.

La mente (el cerebro) es tan poderosa, con su propia energía, tan enigmática, que al dormir podría generar pequeños portales del tiempo y el espacio lo suficiente fuertes para enlazarlos y al despertar, no es más que la ruptura de ese enlace.

Los sueños son mundos paralelos donde habitan seres similares a nosotros o, incluso, totalmente diferentes. Son universos paralelos donde podrían no aplicar las mismas reglas que en nuestro universo, lo cual explicaría el hecho de que allá podamos volar, respirar bajo el agua, etc.

Estos personajes de los mundos paralelos transcurren su vida día a día de forma normal. Sin embargo, cuando dormimos, nos enlazamos (invadimos) con su mente, su cuerpo; a veces controlándolo, y otras veces dejando que ellos lo controle, volviéndonos simples espectadores.

El enlace ocurre con universos donde las cosas que transcurren son similares (compatibles) con nuestro entorno, con lo que el subconsciente siente que se apega más a nuestra realidad.

Esto explicaría porqué tenemos memoria de sucesos que sucedieron en el sueño anteriormente y días, meses e incluso hasta años después, podemos continuar con algo acontecido en el sueño. Explicaría porqué el físico es similar al de un punto de nuestra vida, pero en ese universo no ocurre lo mismo que en el nuestro y por ello aunque nosotros cambiemos, el ser del sueño no lo haga igual. También explicaría porque algunas personas que no conocemos, en esos mundos nos son muy familiares, incluso llegando a llamarse igual, pero a verse y comportarse de forma muy distinta.

Entonces, qué serían las pesadillas? Son universos donde nuestros seres paralelos sufren, universos en los que no nos gustaría habitar, pero que nuestra mente nos es capaz de mostrar para que los conozcamos, entendamos y aprendamos. Cuando enfermamos, puede ser que las pesadillas se presenten debido a que los enlaces no son tan fuertes con los universos más similares al nuestro, resultando en enlaces a mundos desconocidos, a veces, incluso, inimaginables.

Pero qué pasa si el vínculo no se rompe? Eso explicaría las enfermedades de la mente, la invasión de los demonios, las personalidades múltiples, el cambio repentino de personalidad. No siempre el cambio sería para mal, porque también explicaría porqué alguien tiene después de dormir una idea brillante, cambia de un día para otro totalmente su forma de ser. Y que sucede con nuestra mente? Se queda varada en ese mundo paralelo, hasta que le llegue la oportunidad de que nuestro cuerpo la vuelva a enlazar (si es que algún día se llega a presentar).

Se que esta teoría es algo alocada, pero creo que vale la pena analizarlo un poco, ya que no es del todo descabellada (aunque la escriba un pelón XD).

Sunday, November 5, 2017

Tenemos que hablar

Este lunes se supone que cumplimos 5 años, pero pues te dije que quería hablar seriamente sobre varias cosas antes de cumplirlos, y te valió un reverendo cacahuate... entonces, como siempre, hablaré yo.

Que no quieres tener sexo? Las razones que me das, algunas son válidas, otras no tanto... Esto y otras cosas, son algo de lo que necesito desahogarme. Es algo que tengo pendiente de hablar contigo, y sí quiero hablarlo seriamente, pero le das la vuelta, le sacas...

En general, el sexo siempre ha pasado a segundo, tercero y hasta último plano en nuestra relación, desde siempre. Hay razones que me das y que entiendo que son válidas y otras que pues no se me hacen tan válidas. Esto ha hecho que tengamos relaciones con una frecuencia mínima, a veces técnicamente nula. Desde que iniciamos, siempre ha sido así. Yo pensé que era por llevarnosla tranquilos, pero ya van 5 años. Aún y cuando tocarnos y juguetear juntos si hay un poco más, eso es lo único que me ha hecho poder soportar las cosas un poco más.

Esto ya lo hemos hablado antes. Las razones que me das a veces me dejan vacío y desesperado. Las razones: Que no se te antoja, que andas malo del estómago (a lo cual pues luego yo no ando malo, así que no debería ser un problema); que como fumas, se te baja el libido (cuando intentaste dejar de fumar por aproximadamente dos o tres semanas, fue el lapso de tiempo en que más relaciones tuvimos, aunque a lo mucho 4); que te gusta el sexo rudo, que quieres que te muerda y arañe, pero sabes que a mí me da cosa hacerlo porque no me gusta lastimarte (aparte de los riesgos que eso implican); entonces, como me resisto a veces a hacerlo, pues prefieres que si no se hace así, no se haga del todo; dices que soy demasiado dulce y cariñoso, entonces, no  te excita si lo hacemos, en otras palabras, si no hay rasguños y mordidas, técnicamente no tenemos sexo; otra razón son algunos miedos e inseguridades que tienes y que tu sabes cuales son, pero siempre son la razón. Todo esto se resolvería hablándolo, pero nunca me dices nada. Otra razón, que andas estresado por el trabajo, la familia, etcétera, y entonces, nunca andas de ánimo. Si nos quedamos el fin de semana en el depa, pues quieres descansar y no tener relaciones ni nada.

Es obvio que me ocultas las cosas, las verdaderas razones, pero por más que te digo y te pido que me digas las cosas, no lo haces.

Por ánimo, no me refiero al ánimo de tener sexo, me refiero al ánimo en general. Todo esto me indica que las cosas no van por buen camino. Es por eso que necesitamos platicar las cosas en serio. Ya te he dicho que quiero hablar contigo, y más que ya casi cumplimos 5 años... Tú me dices que luego, que no es el momento y demás, entonces, pues ya te dije que tú serás el que decida que hablemos cuando pienses que sea el momento y demás, pero que sea antes de los 5 años... y el tiempo técnicamente se terminó ya.

Será acaso que no quieres hablar porque no tienes las fuerzas para decir "hasta aquí"?

Pienso que sería muy tonto dejar todo por algo así y menos sin hablarlo. Pero no me hablas, ni me dices nada, porque para ti no es un problema, entonces, no le das importancia. Tienes otras preocupaciones por el momento. Pero yo si tengo que hablarlas contigo, porque tengo otras preocupaciones.

Creo que a veces tomas posiciones muy cómodas. Una de ellas es la de no hacer nada y esperar a que las cosas sucedan conforme se van presentando, y eso también implica dejar las cosas para después. Te entiendo, pero no es tan sencillo, porque no siempre eres tu el del problema, soy yo. Y entonces tu si me reclamas diciendo "tu siempre quieres y luego yo no, y ahora que quiero, resulta que tu no quieres".

Hay muchas cosas que preferiría que tu las analizaras y resolvieras solo; te digo cómo me siento, pero no puedo darte todas las respuestas, esa es una posición muy fácil y cómoda de tu parte, y tu siempre tomas la opción, de ser posible. Esto ya te lo he comentado, si tengo que decirte las cosas, ya no valen, porque deben de nacer de ti. Si no nacen de ti, no las entiendes, y si no las entiendes, si no las sientes, cómo le vas a hacer?

El primer problema que tenemos es iniciar la relación sexual. El siguiente problema se presenta durante el acto. Es raro que tomes la iniciativa, generalmente soy yo. Entonces, si eres el pasivo, literalmente te quedas inmóvil, y tengo que hacer la chamba técnicamente al 100%, tu solo te recuestas y ya... Si yo soy el pasivo, ahí a veces termino siendo quien haga más chamba, porque te cansas muy rápido (Nota aparte:por eso la importancia de hacer ejercicio).

Previo a todo eso, debo de prenderte, siempre debo ser yo el que prenda y anime, nunca tu, o al menos, casi nunca. Supongo que a veces si fuiste tu, pero es raro que andes de ánimos y pues creo que fue cuando dejaste de fumar.

Hubo un tiempo en el que eras muy seco, no me acariciabas ni nada, y sentía que no te gustaba, ni te atraía. Sabes que siempre te estoy tocando y toqueteando. Fue hasta que te dije y comenté lo que había visto y sentido que reaccionaste y un poco. Luego le bajé y pues ya no soy como antes, por tu indiferencia. Tu pareces notarlo y apenas es hasta hace poco que empiezas a tocarme un poco más. Una vez te dije que ya lo hacía menos porque no sentía tu interés o que te gustara. Tú me dijiste que no dejara de hacerlo, pero no se me hace justo que tu no hagas nada, y pues es ahora cuando presiento que siento que me empieza a dar lo mismo como a ti.

Otro problema es que te quedas inmóvil, luego no se si te gusta o no, te quejas pero no se si es porque realmente te duele o porque te gusta, tus expresiones son prácticamente iguales. Entonces, si te pregunto algo, pues es para hacerte reaccionar, pero entonces luego luego te enojas y me dices que ya se te bajó el libido y que ya arruiné la cosa, y obviamente, le paramos. Pero pues es muy desesperante para mi no saber qué quieres, qué sientes si no me dices nada, no haces nada y pues quieres prácticamente que adivine todo. Me has dicho que no te gusta que hablemos durante el sexo, pero como te quejas de que te duele (por tus caras y gestos), a mi es al que se me baja el libido y aún así lo intento, y busco cómo hacer las cosas bien, pero tu no.

A veces pienso que soy yo en algunas cosas, pero luego vieras la cantidad de chicos que me echan los perros, el calzón y demás, y no me interesan ellos, lo que me interesa es lo que pienses o sientas tú, pero es tanta tu comodidad que no me dices nada y siento que no te atraigo, al menos, no de la misma manera.

Fácilmente podría hacer cosas con alguien más, pero no es algo que me gustaría que me hicieran y por lo tanto es algo que prefiero no hacer. Antes de eso, preferiría probablemente romper con la relación. Luego me haces insinuaciones en juego de que a ver si algún día nos conseguimos a un tercero para hacerle un dos romano o cosas por el estilo.

A veces siento que quieres buscar a alguien más, y eso me hace sentir que no te atraigo (y que definitivamente el sexo conmigo no te gusta), y eso me frustra. Y si ese es el caso, lo que me frustra es que no me lo digas, porque obviamente, es más cómodo para ti no hacerlo. Mi problema es que te sabrosées a los demás y a mi no. Se que no soy el de mejor cuerpo ni mucho menos, pero si tanta gente se sabrosea conmigo (así ya directamente me lo han dicho más de uno), porqué tú no? Siento que me consideras algo seguro y por lo tanto no tienes nada que batallarle.

Pienso que nuestros problemas tienen solución, pero no me gusta que siempre sea yo el que busque las soluciones, el que las proponga y demás; porque siempre soy yo el que tiene el problema, el que tiene que platicar las cosas contigo, el que se queja, el que se inconforma y demás. Y siento que todo es por tu comodidad y conformismo. Mientras tu estés a gusto, no importa lo demás, sobre todo, si no eres tu quien tiene que buscar la solución, o si la decisión la puedo tomar yo.

Por esto ya te dije que necesitábamos hablar antes de los 5 años. Ya alguna vez quise que buscáramos una terapia de pareja, pero sé que si no soy yo quien lo busca y propone, tu no harás nada, y quiero que seas tú quien lo proponga, que me demuestres que realmente te importa. Ya te lo he insinuado, pero mientras no te cueste, o si yo puedo tomar la decisión, no harás nada.

Eres demasiado pasivo en todo, pero no es por sumisión, sino por comodidad, y es algo que no me agrada. No te gusta tomar decisiones, porque entonces, sabes que las consecuencias serán por tus decisiones. Si no eres tu el que toma la decisión, es más fácil librarte de la culpa. Eso aplica no solo en el sexo, sino en todo, y es algo de lo que también quiero hablar contigo. Por eso te dije que serías tú el que elegiría el momento y el lugar, ya me cansé de ser yo el del problema. Y no lo has tomado en serio, has dejado pasar el tiempo, y eso ha sido plenamente tu decisión.

Todo esto que te digo, es solo mi punto de vista, pero mi problema es que no puedo saber tu punto de vista porque no me dices nada. Cuando hablamos, me dices que no tenías idea de que hubiera un problema o que me sintiera así. Y te pregunto si tienes algún problema conmigo, y hasta te insisto para saber en que estoy mal, pero no me dices nada, o que todo está bien.

Sé que me quieres, pero estás cómodo donde estás, das la impresión de que no te doy problemas, pero no te importa si yo tengo problemas, mientras tu estés a gusto.

No quería que llegara la fecha de los 5 años sin que hablaramos las cosas. Pero pues mi problema es que cuando te digo "tenemos que hablar", te pones a la defensiva, ya sea que me digas que no es el momento, el lugar o si te digo que platicar después, que no te gusta que lo "agende". Si lo hago, es para que te programes mentalmente, que lo pienses y lo asimiles con tiempo, pero como te gusta todo de improviso, pues ahí chocamos.

A veces pienso que ya no hay la llama que había al inicio (si es que la ha habido), y me desespera porque siento que por mi no ha quedado y no puedo saberlo porque no me dices nada.

Te dije lo "malo" que me siento, pero no te he dicho lo bueno, la razón de porqué es que la relación ha durado tanto tiempo y se ha mantenido, porqué es que te amo y sé que me amas, la relación de pareja implica muchas cosas, el sexo es solo una de ellas, y por eso quiero arreglar las cosas. El sexo no es lo único ni lo más importante en una relación, pero si es importante.

Este lunes se supone que cumplimos 5 años, pero pues te dije que quería hablar seriamente sobre varias cosas antes de cumplirlos, y te valió un reverendo cacahuate... y yo, la verdad, ya no puedo dejar las cosas pasar, y peor, ver que a ti no te importen. Así que ya cumpliremos 5 años hasta que a ti se te venga en gana, porque tristemente, me empieza a dar igual. Eso me da mucho coraje, mucha rabia, tristeza y desesperación. En fin, has lo que tú quieras, como hasta ahorita.

Dicen que hablando se entiende la gente, pero qué haces cuando la otra persona le saca la vuelta a la plática?

Friday, November 3, 2017

El eterno enamorado

Ayer me di cuenta de que soy una persona aburrida.

Si se trata de ser cariñoso, apapachar, acariciar, ser empalagoso, no tengo ningún problema... Y ese es mi problema. Puedo estar así todo el día y no me incomoda.

Soy una persona demasiado tranquila, alivianado, tratando siempre de que los demás se sientan bien. No me importa recibir gestos amables y cariñosos de las demás personas, no me molesta, pero me puede llegar a ser indiferente si lo hacen, entonces, suelo confundir a las personas, haciendo que piensen que quiero algo más, o que pueden tener algo más conmigo.

Cuando uno se enamora, todo es color de rosa. Es la etapa más dulce y empalagosa de cualquier noviazgo y relación. Esa etapa no me molesta si se vuele eterna, y a la mayoría de la gente, si no es que a todos los demás, en determinado momento les cansa, les aburre, les agobia. Ahí es donde empiezan los problemas.

Nunca me han gustado los problemas, las peleas, las discusiones, los pleitos, y haré todo lo que esté en mis manos para evitarlas o corregirlas, a modo de recobrar ese estado aburrido del eterno enamorado.

Cuando estás enamorado, ves las cosas buenas sobre las malas, ves las virtudes sobre los defectos. Tienes esperanza de que las cosas pueden ser así por siempre, o pueden incluso mejorar. Eso a algunas personas las hace sentir bien, las confunde, incluso, las aterra.

En muchas ocasiones sé que soy como un niño, en mi actuar, en mi pensar, en mi sentir; y sin embargo, muchas veces tengo una visión y actitud paternalista, de defender aquello que estimo y quiero.

La gente que está falta de amor, se confunde y se enamora, confundiendo mis intenciones, que muchas veces simplemente son de amistad y empatía. La gente que no cree en el amor, piensa que soy hipócrita, un loco, un infantil. La gente que tiene mucho amor, son gente hermosa, les admiro y quisiera poder ser la mitad de como son ellos.

Desafortunadamente, aunque muchos digan que les guste y sientan bonita mi forma de ser, la mayoría de las personas requieren de algo de caos en sus vidas, algo de sufrimiento (algunos bastante), algo de amargo, salado y cualquier otro sabor, para poder ser felices, para que su vida tenga sentido. Yo no puedo ser así. En cierta manera les envidio, porque la vida sería más sencilla de vivir, pero no puedo ser así.

Entonces, qué pasa, qué pasó, qué pasará? Estaré destinado a la soledad, a la incomprensión, al destierro por siempre?

Todos dicen querer algo, pero al final, nadie sabe realmente lo que quiere... Y cuando lo quiere, lo quieren por un momento, hasta que se aburren, porque realmente lo querían por un momento, y ahora quieren algo más. Porque el querer es algo pasajero, momentáneo, solo mientras así les conviene.

Wednesday, November 1, 2017

Full of fools

You are so full of yourself and yet, you are starving.

You are so full of yourself, that I only make a fool of myself.

You are so full of yourself, that you only share scrums with the fool...

If you are so full of yourself, how will you let anyone live in your heart?

If you are so full of yourself, how can you share yourself with others?

If you are so full of yourself, you are on a fool's diet.

If you hadn't been so full of yourself, you could have had a taste of me.

If you hadn't been so full of yourself, I wouldn't be craving for someone else.

If you hadn't been so full of yourself, your life wouldn't had been the one of a fool.

At the end, we were boths fools, both empty, both alone...